Luis Jesús, de 25 años, y su esposa Ofelia, de 27, viven en Bahía de Lobos, Sonora, junto a su hija Madeline, de 3 años. Luis trabaja como pescador y Ofelia se dedica al cuidado del hogar, mientras esperan con ilusión el próximo ciclo escolar para que su pequeña pueda ingresar al primer grado.
La familia enfrenta grandes desafíos: viven en condiciones de hacinamiento y pobreza, en una situación de rezago social. Su hogar es un cuarto prestado por el tío de Luis, donde comparten el espacio con otras cuatro personas. La falta de ingresos estables hace que construir un hogar propio sea un sueño lejano.
Luis y Ofelia han soñado con darle a su hija un hogar digno, pero sus ingresos como pescador no alcanzan para hacerlo realidad. La familia vive con la esperanza de encontrar apoyo que les permita salir del círculo de pobreza en el que se encuentran. Se han acercado al equipo de Construyendo con la esperanza de que, con su ayuda, puedan construir un hogar que les brinde no solo techo, sino también seguridad y alegría para su hija.