Zinthia (25 años), y su pareja Jesús (20 años), conforman una pequeña familia junto a sus dos hijos: Cinthya (6 años), que asiste a la primaria, y Jesús Roberto (1 año). Viven en Bahía de Lobos, Sonora, donde la pobreza, el hacinamiento y el rezago social son una realidad diaria.
En su hogar, un pequeño cuarto prestado con techos de lámina, comparten el espacio de la cocina y la cama. Su vida está marcada por la lucha constante por mejorar sus condiciones, pero con los pocos recursos disponibles, su sueño de un hogar digno parece lejano.
Zinthia y Jesús han soñado con un futuro mejor para sus hijos, pero los ingresos que generan apenas cubren lo básico. En su situación de hacinamiento, los problemas parecen no tener fin. Es por ello que han decidido buscar apoyo, acercándose al equipo de Construyendo, con la esperanza de recibir una casa digna que les permita dejar atrás la miseria y ofrecerles a sus hijos un hogar lleno de seguridad y bienestar.