FAMILIA DUARTE ARMENTA
En Bahía de Lobos, Sonora, la familia de Edgardo Espinoza Valenzuela, de 47 años, se dedica a la pesca. Su pareja, Lucía Guadalupe Duarte Armenta, de 37 años, es ama de casa. Con ellos viven sus dos hijos: Edgardo Espinoza Duarte, de 7 años y estudiante, y la pequeña Coral Espinoza Duarte, de 1 año.
La situación de Edgardo y Lucía refleja un desafío constante de estabilidad. Viven en una casa prestada por una amiga desde hace tres años, generando incertidumbre. Obtienen la luz y el agua también de prestado, contribuyendo con un pago bimestral por la electricidad. Lucía recibe anualmente una ayuda del programa para familias de pescadores, un soporte importante para su economía familiar. Su hogar actual es una casa de madera con suelo de cemento. Carece de ventilación natural, ya que sus dos ventanas están tapadas, y el techo también es de madera. Para los cuatro, solo tienen una cama. Cuentan con una estufa, pero la falta de refrigerador los obliga a comprar alimentos diariamente. Disponen de un sillón y una pequeña cómoda.
Edgardo y Lucía buscan el apoyo de “Construyendo” porque necesitan una casa en buenas condiciones. Sueñan con un hogar cómodo y seguro, especialmente crucial en tiempos difíciles. Desean un espacio propio y estable para sus hijos, Edgardo y Coral, un lugar que represente un cimiento firme para su futuro y su bienestar.