FAMILIA VARGAS MOLINA
La independencia es un aspecto fundamental para el desarrollo de un adulto joven, ya que brinda la posibilidad de tener privacidad, estabilidad y de tomar decisiones propias. Contar con un espacio propio permite crecer con seguridad y confianza, mientras que la falta de independencia limita el desarrollo personal, genera sentimientos de dependencia y reduce las oportunidades para construir un mejor futuro.
María Flor Vargas Molina tiene 21 años y trabaja en maquilas del Bajío elaborando jabones. Vive en casa de sus papás junto a su familia, integrada por cinco personas. Comparte el cuarto con su hermana, lo que refleja las dificultades de espacio e independencia. Además de aportar al hogar, apoya a su hermana con sus estudios y ahorra con el deseo de contar algún día con un espacio propio. Le ayuda a su hermana con dinero cada semana para sus estudios.
La vivienda donde habitan cuenta con cinco cuartos, de los cuales tres son ocupados por toda la familia. El cuarto de María Flores está en buenas condiciones. . El baño es completo y está dentro de la vivienda, pero toda la propiedad pertenece a sus padres, lo que limita sus posibilidades de independencia. La familia cuenta con servicios básicos como luz, agua y fosa séptica, además de tener cerca el doctor, la escuela y la tienda a 15 minutos caminando.
El apoyo de Construyendo le permitiría a María Flor acceder a un espacio propio, brindándole la independencia que necesita para desarrollarse plenamente y mejorar su calidad de vida. Tener una vivienda digna sería la oportunidad de crecer, aportar a su comunidad y construir un mejor futuro. Gracias al compromiso de aliados y voluntarios, este sueño puede convertirse en una realidad que transforme no solo la vida de María Flor, sino también la de muchas otras personas que buscan un lugar seguro y estable para seguir construyendo sus sueños.