La familia Cazales Hernández está compuesta por Heidy Hernández, una joven de 23 años, quien trabaja como empleada doméstica para sostener a sus dos hijos: Alán Rafael Cazales Hernández, de 7 años, y Elena Cazales Hernández, de 2 años. Juntos, han enfrentado la pérdida de Salvador Cazales, el padre de la familia, quien falleció en un accidente a principios de 2024.
Heidy y sus hijos viven en situación de hacinamiento y pobreza. Los ingresos de Heidy, provenientes de un trabajo informal, no son suficientes para cubrir las necesidades familiares. Residen en casa de Esther, madre de Heidy, quien les ofrece un cuarto compartido; donde viven los tres integrantes de la familia junto con la hermana menor de Heidy y su hijo. Además, esta habitación presenta problemas de humedad en temporadas de lluvia debido al deterioro de los muros.
Al enterarse del apoyo de Construyendo, se acercaron con el anhelo de tener una casa propia. Heidy y su esposo Salvador colaboraron como voluntarios cuando él aún vivía, y juntos soñaban con la posibilidad de tener un hogar propio. Hoy en día, ella busca este apoyo para honrar la memoria de su esposo y seguir esforzándose por sacar adelante a sus dos hijos.