La familia Yáñez Marín está compuesta por Salvador (31 años), quien trabaja en el campo durante la semana, su esposa Andrea (37 años), quien tiene un empleo a tiempo parcial como encargada de una tienda de abarrotes, y sus tres hijos: Salvador (6 años), Erick (8 años) y Brisa (16 años), quienes están en diferentes niveles educativos. Residen juntos en la comunidad de Ocuituco, en el estado de Morelos.
Salvador y su familia enfrentan dificultades diarias debido al hacinamiento y la escasez económica. Su vivienda consta de un solo cuarto, donde deben afrontar las condiciones difíciles debido a la falta de espacio; la cocina y el comedor comparten el mismo espacio que el área de dormitorio. Como familia, se ven obligados a compartir solo dos camas matrimoniales durante la noche para descansar.
Salvador y Andrea carecen de los recursos necesarios para ofrecer a sus hijos un hogar digno. Las dificultades económicas los obligan a vivir al día, sin un espacio propio. Su mayor anhelo es tener una casa que mejore su calidad de vida y evite el aumento de problemas por el hacinamiento. Por esta razón, se han acercado a Construyendo con la esperanza de recibir ayuda.